miércoles, 7 de julio de 2010

Con las alas puestas

Sólo sé que tengo que cerrar los ojos; que tengo que esperar. Observar bien la trayectoria para saber cómo llegarán los golpes. No enojarme. Que no debo perder el preciado tesoro de mi sonrisa que siempre me salva. Que las promesas son transitorias, nunca definitivas. Sé que puedo reinventarlo todo: los besos, los pasos, las historias, las miradas. De repente me siento enamorada de lo que sea. Como si volviera a ser inocente. Como sin ganas de estrellarme contra quien se me acerque. Como del color de los sueños. Amable, querible, estrujable, inofensiva, suave. Muy suave.

2 comentarios:

  1. Definitivamente, palabras inmortales de Lourdes Meraz.
    Me encanta la profundidad de estas palabras, me a ayudado mucho ultimamente.
    gracias!
    michelle salin :D

    ResponderEliminar
  2. ¡Michelle!
    ¡Un honor tenerte por acá!
    ¡Muchas gracias!

    ResponderEliminar